La atención al niño maltratado presenta unas características particulares y deberá:
• atender las lesiones (atención sanitaria, comprobación diagnostica, validación de las declaraciones) acompañarse de apoyo emocional y tratamiento psicológico. La atención clínica de las lesiones no difiere de otras lesiones equivalentes por otras causas, por lo que en cuanto al tratamiento exclusivamente médico - quirúrgico no existen diferencias.
• considerar el tratamiento de la crisis (lesiones, problemas de salud asociados, posibles secuelas, repetición del maltrato) y después dela crisis (efectos a corto y largo plazo)
• apoyo emocional
• equipo multiprofesional (intervención de los servicios sociales, salud mental,...)
• coordinación
• realizarse un seguimiento posterior del niño y su familia
• prevención
La validación (comprobación diagnóstica) deberá determinar la validez de la notificación evaluando:
• veracidad de la denuncia / notificación.
• gravedad del daño infligido al menor.
• riesgo de maltrato o daño y su severidad, y,
• las causas (etiología )que originaron la situación de maltrato (factores de riesgo existente),
• del grado en que las necesidades básicas estén cubiertas y los recursos familiares y sociales en
torno al menor.
El apoyo emocional es imprescindible en el maltrato infantil ya que las consecuencias y secuelas psíquico-emocionales siempre van a estar presentes en este problema tanto a corto como a medio-largo plazo.
El maltrato infantil es un problema multifactorial con repercusiones múltiples que afecta al niño y su familia por lo que requiere ser atendido por un equipo multiprofesional.
La solicitud de intervención a los servicios sociales puedes ser para:
• solicitar información para confirmación diagnóstica
• posibilidad de facilitar apoyos, ayudas
• adoptar las medidas de protección infantil necesarias
• su conocimiento a los efectos oportunos de trabajo social
Para ello, esta fase debe incluir un protocolo de trabajo / investigación de los servicios sociales de acuerdo al papel y a las herramientas propias de esta profesión.
La coordinación es una palabra clave en la intervención en casos de maltrato infantil resultando la
realización del trabajo sanitario y social de forma conjunta e imprescindible para el detección, diagnóstico y tratamiento de los casos de maltrato infantil, correspondiendo a cada ámbito profesional encargarse
de las actividades propias de su actividad.
Debe realizarse un seguimiento posterior del niño y su familia no limitándose al tratamiento de la crisis.